Una mujer se pregunta sobre qué será ser mujer para el deseo del hombre.
Acude a un médico. La histérica funda el psicoanálisis.
Sus encuentros llevan la marca de fallidos; sólo queda la nostalgia. Sufren de reminiscencias. Están atrapadas en su propio deseo.
La Histérica grita en sus síntomas que no hay verdad sobre el sexo: denuncia un encuentro con otro prehistórico, denuncia que la relación sexual no existe; al ser falo no puede ser mujer y queda en el enigma.

La histérica que cree representa a la mujer es llenada por el médico de fantasmas - con los que él recubre los huecos de lo que no entiende -.
La histérica es creación del psicoanálisis y del psicoanalista. El psicoanálisis hará una teoría sexual de la neurosis. La etiología es sexual, pero no genital. Lo que el sujeto no puede decir en palabras lo dice en síntomas, pero los síntomas no remiten a la relación sexual sino a la sexualidad del inconsciente. El psicoanálisis hará distintas teorías: teorías de la seducción por el padre, teoría de la fantasía, teoría de la represión. La histérica perpetuamente pone trampas, está habitada por los fantasmas. Schreber: narcisismo, pulsión de muerte. Del padre perverso y seductor a la función del padre, es lo que va de Isabel a Schreber.
       - Lo que el cuerpo debe al significante para poder se allí.
       - Deseo del deseo del otro; mundo de los fantasmas.
       - El estilo es el otro, el estilo es el personaje, el yo, el artista.
       - El lenguaje es lo que se dice pero también lo que no se dice.
       - El cuerpo es siempre una geografía libidinal. Su deseo es el de la histérica: gozar de un deseo insatisfecho porque el deseo es coexistente con su irrealización.
       - Búsqueda del deseo, encuentro con el objeto, búsqueda del deseo. El acto neurótico tiene que apuntar al deseo, pues el pasaje por el lugar del otro tiene lugar bajo la forma de separación.

De ahí la pregunta de la histérica; ¿qué es ser mujer para el deseo del hombre? Estar en el lugar del deseo es para la histérica un encuentro fallido en forma de acto (que se acuesten las otras, la otra mujer de la triangulación. La relación sexual no existe). La histérica representa todo lo representable por no descorrer los velos tras los cuales está la nada; caricaturiza a la mujer por el miedo a que no exista. Reivindicación de la mujer; siendo el falo, el poder aunque no lo posee, ella es; la mujer no existe la histérica sí. Goza del deseo de desear, gozar del deseo insatisfecho de gozar y así existe.
Mientras tanto, la otra mujer, la paranoica, la que le hace para su goce, su transgresión, remite a la relación de la niña con su madre.
La mujer histérica se enorgullece, el hombre histérico se avergüenza, y cuando no lo puede resistir más se llama hipocondríaco.
La mística está del lado de lo femenino. ese gozo inefable que se goza pero que no se sabe.

Problema del Fantasma: Preguntas
1. ¿Qué puede significar que Freud diga que la sexualidad no existe porque la sexualidad es el inconsciente, la sexualidad es la subjetividad?
Freud enfocaba la neurosis como un conflicto entre dos instancias. La pulsión es anterior no sólo al síntoma, sino también al sujeto del inconsciente.
La histeria es para el psicoanálisis la primera neurosis analizada, lo que permitió escuchar el discurso analítico. Ella busca a alguien que sepa todo sobre ella en el analista,. La histérica se dirige en el analista a un personaje.

Trampa que plantea la histérica: que somos en un continuo, en una perpetua interacción, en un encuentro con el otro, nuestro self resulta de la transacción con el otro. Pero en el self que se puede desprender en el contacto con la histérica es que nos puede ¿        ?  en un huracán de fantasmas, por la poca consistencia del propio self del terapeuta,  sería creerse con un saber omnipotente.
El análisis de la histérica es la restitución a la palabra de lago que se expresa por el cuerpo.
No se puede tratar de interpretar algo que está en un proceso de desarrollo. El síntoma histérico, sin embargo, es una marca, un trazo de lago terminado hace mucho tiempo. Es un emergente en el que hay que descubrir la historia pasada.
El deseo que no es realizado. La apuesta del juego del deseo puede a veces triunfar, pero siempre lo importante es el deseo. Transición del plano de lo biológico a lo psicológico: corporeidad, deseo, sexualidad, goce.

*¿Qué es la realización del deseo? El cumplimiento del deseo en cuanto que acto simbólico, manifestación existencial de un sujeto que se pone como sujeto del deseo, como agente de actividad que no se puede confundir. afirmación del deseo como afirmación de la existencia del sujeto.
Deseo como esquema de representación y organización de acción de un sujeto. El cumplimiento de un deseo no entraña que se realice o no el fin.

Peligro del analista: colocarse en el lugar que le marca la histérica, proyectando su propio deseo.
El deseo cumplido resucita hacia otros objetos, pero de estar cumplido una vez deja trazos que han constituido al sujeto.

El síntoma histérico es un significante que falta, y por el agujero que resulta del corte de la cadena significante aparece el cuerpo. esa remisión al cuerpo es lo propio de la histeria. Una falta en el discurso se soporta en la medida en que no envía a otro corte a nivel del cuerpo. Cuando corte en discurso y corte en el cuerpo se superponen: depresión, pérdida real de objeto a nivel del cuerpo, ya sea objeto externo o vacío en alguna parte del cuerpo.

Utero voraz, retención del macho púber y prepuber.

Las histéricas no devienen tales tal el traumatismo sexual; Freud abandonó la teoría traumática para sustituirla por la teoría del fantasma.

HISTERICA:  Toda persona que en una situación sexual no experimenta excitación o experimenta repugnancia, es el traumatismo de no sentir nada donde todo el mundo siente algo.

Los síntomas
Anestesia y parálisis histéricas, síntomas cervicales, (síntomas a recortar siguiendo la línea de puntos), en el lugar del cuello algo puede detenerse.
El síntoma de la voz de falsete.
Recorte con el maquillaje; corte en el cuerpo, como las joyas. Maquillaje y joyerías es para ofrecerse al otro como fetiche.
Aparece un corte, un agujero al nivel del cuerpo, y bajo ese agujero ¿qué se descubre? Una piel agujereada se llama a menudo cadáver, el cuerpo muerto; las cosas que refuerzan la belleza, la histérica busca una perfección particular: la de la imagen que se propone al otro.
El histérico no soporta la resignación no se calma.

ISRAEL: El goce de histérica.